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El mal rendimiento de estos componentes puede provocar fallos en el motor o incluso la imposibilidad de un funcionamiento adecuado
San Pablo, Enero 2024 – Un Niterra, Multinacional japonesa propietaria de las marcas NGK y NTK y especializada en componentes para sistemas de encendido y sensores de automoción, Destaca cinco indicadores de posibles problemas con la bobina de encendido. El bajo rendimiento de este equipo vital para la generación de alta tensión en las bujías puede provocar fallos en el motor o incluso la imposibilidad de su correcto funcionamiento. verificar:
1- Dificultad de arranque en el motor;
2- Fallos en el acelerador y ralentí errático;
3- Aumento del consumo de combustible y de la emisión de gases contaminantes;
4- Daños en el convertidor catalítico;
5- Contaminación por aceite lubricante.
"Estas señales tienen el potencial de afectar la durabilidad de los componentes del motor, una vez que el combustible no quemado se libera en el sistema de escape, en el que se encuentra el catalizador. Este convertidor catalítico funciona a temperaturas superiores a 300 grados, lo que aumenta la probabilidad de ignición del combustible no quemado y, como consecuencia, genera daños", explica Hiromori Mori, Consultor de Asistencia Técnica Niterra.
"La presencia de combustible no quemado representa una amenaza para la integridad del aceite lubricante debido a la contaminación que puede comprometer significativamente la durabilidad del motor", agrega Mori.
¿Por qué aparecen los signos?
Los factores mencionados anteriormente pueden aparecer por varias razones, tales como:
"Las bobinas de encendido no tienen una durabilidad definida por los fabricantes de automóviles - depende de las condiciones de mantenimiento del vehículo", dice Mori.
Solución de los problemas
La rápida identificación y corrección de estos problemas es esencial para garantizar el pleno funcionamiento del sistema de encendido. Un aspecto que contribuye a este rendimiento es que el conductor es consciente del momento ideal para llevar a cabo su mantenimiento. Se recomienda realizar una inspección del sistema cada 10.000 kilómetros o, por lo menos, anualmente.
"El enfoque más efectivo en este punto es ejecutar una prueba funcional, en el que un mecánico evalúa el voltaje de disparo de la bobina y la forma de onda de la señal. También es posible realizar una inspección visual, identificando problemas como la oxidación y el agrietamiento", afirma Mori. "También hago hincapié en la importancia de evaluar el funcionamiento del motor, especialmente durante la aceleración con carga, cuando se requiere un mayor estrés. "
Para bobinas que ya han sido comprometidas, la marca NGK, de Niterra, ofrece al mercado de recambios de automoción una amplia gama de estos productos desarrollados especialmente para los mercados asiáticos, Europa, Estados Unidos y Brasil. Se trata de componentes que cuentan con alta tecnología y calidad y garantizan que el motor esté dentro de las especificaciones de rendimiento, Economía y emisiones.